¿Te has ido?

by Octavio de Js. Mirabal Lora

Aquí estoy, aquí me tienes, sentado, olvidado en el tiempo, escurrido en instantes sin sabor. Sólo soy hoja arrastrada por el viento.
La verdad que contigo no bastan las palabras. Amor, mi corazón, mi luna y mi sol, si tú.

Mas si en el descenso de los días me torno inútil, en tus brazos encuentro paz, armonía, alivio, sabor, ganas de amar, besos deliciosos, manos cálidas ¿Cómo no quererte?

¿Casi llegar a aborrecerte se me hace imposible, si a diario crece la fe en ti y en las noches duermo en tu sonrisa y disfruto hasta tu enojo.

Es tan corto el tiempo y es tan larga tu ausencia, que si me detengo a solo observar me desvaneceré en suspiros inservibles y sin rastro humano.

Soy llanto, soy veneno, soy intruso hasta en tus sueños. No comprendo, no descifro hasta a veces ni imagino, quiero ver, no estar a oscuras.

Entender esta locura, ser de ti, eso espero, permanecer, solo un deseo, volver, no castrar mi sentimiento.

Desnudo, a la intemperie y estancado en tu recuerdo. Hundido, mas no vencido, abatido, triste y desolado; refugiado como náufrago aferrado a tu cuerpo.
No pertenezco a este lugar, no creo poder adaptarme, es simple, eso crees, exageras, y yo como siempre, minimizo. Te distraes y rehúsas ver.


Externa tu opinión, no disfraces la realidad, da tu estocada final, despierta, no duermas más, saca a flote las inquietudes que te atan.

No vivir por lo que siento, un descuido, un tormento, dispara o hazlo lento, devora este lamento.